Se necesitan emprendedores ¡Urge crear fuentes de empleo!

Dr. Luis Miguel Beristain*

Resulta evidente el desmoronamiento de la economía frente a nuestros ojos. Y sin embargo la respuesta es tibia, incluso ingenua y algunos argumentarán, mal intencionada, para hacer frente al fenomenal reto. La crisis más profunda se encuentra en sus inicios, una crisis jamás experimentada por esta generación. Atendiendo sólo la crisis económica sin restar importancia a las crisis de sanidad y social, la caída de México superará los 10 puntos porcentuales del PIB (para quien esté interesado en los aspectos técnicos sobre escenarios económicos, recomiendo la lectura de las cinco columnas, “Documentando la caída”, del Dr. Macario Schettino[1]).

El problema de medir las magnitudes económicas son los promedios. Como argumenté en una contribución previa,[2] la pandemia afecta de forma diferente y por períodos desiguales de recuperación a cada industria, sector y empresa: algunos están experimentando un período de bonanza mientras otros se encuentran atrapados en una verdadera catástrofe. El drama es para las personas de carne y hueso con la urgencia de resolver el sustento familiar antes de llegar a medidas desesperadas. Emprendedores(as) y empresarios(as) debemos ser sensibles y solidarios con esta realidad.

Las personas son más que números en las estadísticas

Según las cifras publicadas por el INEGI a finales de junio con las cifras oportunas de mayo 2020 de ocupación y empleo[3], comparadas con marzo del mismo año, la PEA[4] ocupada se desplomó en 11.7 millones de personas con un crecimiento de la PNEA[5] Disponible en 13.6 millones. De la PEA ocupada, 13 millones se encuentra subocupada, sin perder de vista los 1.9 millones de personas declaradas abiertamente como desempleadas. Algunas cantidades son “temporales,” sin embargo dependerá de la mentalidad emprendedora y capacidad de reinvención de las empresas, particularmente micro, pequeñas y medianas, a las restricciones impuestas por razones de sanidad. Paradójicamente, una eventual recuperación económica no necesariamente reducirá el desempleo, la subocupación y la desocupación, pero ciertamente la recuperación será frenada por el desempleo.

Una sociedad donde millones de seres humanos no encuentran un trabajo decente o simplemente un trabajo remunerado, no cuenta con un sentido social de valor y dignidad de la persona. Por supuesto, las personas no valen por el producto de su trabajo, lo valen por el simple hecho de ser personas, pero si no se sienten valoradas por la sociedad, actuarán fuera y contra ésta de forma manifiesta y en ocasiones violenta. En esta ocasión el problema es grave y requerimos una nueva interpretación del retorno sobre la inversión para cualquier iniciativa empresarial o emprendedora que finalmente brinde más importancia a la creación de buenos empleos y no a los retornos financieros, pero siempre cuidando la viabilidad económica. Hoy no son suficientes la caridad, la filantropía, ni los programas clientelares.

El llamado

Surge así un llamado urgente a las personas con iniciativa, empresarios(as) y emprendedores(as), para crear empleo, así sea el propio. Porque trabajar, como lo expusiera magistralmente el maestro Carlos Llano Cifuentes,[6]  no sólo aporta el sustento económico, sino, además, el medio por excelencia para desarrollar el potencial del ser humano; el vehículo para alimentar el desarrollo anímico y psicológico del hombre y la mujer; el vínculo más sano y productivo del individuo con la comunidad, y la única forma honesta como meritoria de construir un patrimonio provechoso. Por estos motivos, cada mañana hay que levantarse a trabajar, aunque no recibamos pago.

La acción

Ante este panorama, son necesarios emprendedores y empresarios, hombres y mujeres, con mentalidad emprendedora capaces de reinventar su fórmula de negocio y diseñar nuevos modelos de negocio para crear buenos empleos y riqueza. En una aportación anterior,[7] abordaba la importancia de contar con un proyecto estratégico de renovación. ¿Cómo hacerlo?

  • Empezar por el diseño de una hipótesis sobre el presente y futuro del segmento de mercado particular en el contexto COVID. Todo indica que durará al menos un par de años con posibilidad de extenderse a los tres.
  • En el proceso de diseño de las hipótesis sobre el entorno inmediato, surgirán ideas sobre las oportunidades ofrecidas por el nuevo contexto. Todas deberán ser evaluadas por los resultados al ponerlas a prueba en el mercado.
  • Idealmente, las nuevas ideas de negocio deberán construirse a partir del conocimiento, las capacidades y los recursos de la empresa o del emprendedor.
  • Diseñar y ejecutar pequeños experimentos para validar los supuestos de la hipótesis acerca del segmento y de la idea de negocio. No ponga en riesgo el patrimonio de la empresa o el personal en el proceso de validar la hipótesis sobre la oportunidad. Como se dice en el mundo de los emprendedores, es indispensable aprender a “diseñar experimentos rápidos, sencillos y baratos.”
  • Definir tres no negociables relacionados con los principios y los valores para tomar decisiones con agilidad. Contamos con poco tiempo y no podemos darnos el lujo de equivocarnos éticamente en nuestras elecciones.

Tenemos ante nosotros la enorme oportunidad de reinventar nuestra sociedad a través de la acción emprendedora y empresarial, conduciéndonos con prudencia para dar respuesta a preguntas que no han sido formuladas y resolver problemas que todavía no sabemos de su existencia. Sólo la mentalidad y acción emprendedora, acompañada de prudencia, nos permitirán evaluar cada alternativa posible cuando el abanico es amplio y crear las oportunidades para todos.


[1] Macario Schettino. (2020). Fuera de la Caja. El Financiero, 27 de abril a 1º de mayo, 2020, https://www.elfinanciero.com.mx/opinion/macario-schettino

[2] Beristain, L.M. (2020). La pregunta que todo emprendedor (y empresario) debe responder sobre la realidad Post-COVID. Knowledge in Motion, 15 de mayo 2020, https://www.ki-motion.com/la-pregunta-que-todo-emprendedor-debe-responder-sobre-la-realidad-post-covid/

[3] INEGI. (2020). Resultados de la encuesta telefónica de ocupación y empleo (ETOE): Cifras oportunas de Mayo 2020. Consultado en: https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/boletines/2020/enoe_ie/ETOE2020_06.pdf

[4] Población Económicamente Activa.

[5] Población No Económicamente Activa.

[6] Llano Cifuentes, Carlos. (1995). La creación del empleo: para desempleadores y desempleados. México: Panorama Editorial.

[7] Beristain, L.M. (2020). 3 acciones que las pequeñas y medianas empresas deben implementar para responder al shock del COVID-19. Knowledge in Motion, 24 de Abril 2020, https://www.ki-motion.com/3-acciones-para-hacer-frente-a-la-crisis/

Luis Miguel Beristain

Director del Instituto de Emprendimiento Eugenio Garza Lagüera del Tecnológico de Monterrey, Región Sur